La permacultura nació en los años 70 debido a la contaminación del agua, aire y
suelo que se estaba produciendo
dando una solución a éstos
problemas con actividades que beneficiaron a la naturaleza.
Ya después de 30 años todavía seguimos
viendo muchos problemas sobre la contaminación de los componentes naturales, el
desperdicio de los recursos, el consumismo acelerado lo que genera la
disminución de los recursos y la generación de más desechos y basura.
Pero con este panorama tan desalentador
siempre hay una luz al final del camino; la permacultura esta creciendo y cada
vez más personas se dan cuenta de la importancia del cuidado de la naturaleza.
No es una tarea fácil ya que la permacultura se vasa en la vida por medio de la naturaleza y en un mundo donde las
ciudades son selvas de cemento y
asfalto.
Pero desde la misma casa con las acciones
que realizamos sobre el cuidado del agua,
el reciclaje, el manejo de las basuras, y
porque no las huertas caseras que actualmente se están difundiendo
y aplicando en las ciudades y la educación la cultura que se es trasmite a
los niños, es un avance para la mejora
de la naturaleza y el desarrollo sostenible , hasta los nuevos productos
que salen al mercado son biodegradables fabricados con productos ecológicos.
La permacultura como una nueva “filosofía “,
aplicarla según el contexto en que estemos.